Julieta Fierro Gossman
5 years
Ayer vi a una mujer descalza, cargando a un bebé con un rebozo, se agachó y otro niño, también descalzo, como de tres años, se subió a su espalda y aventó un pelota mugrosa. No se me borra la cara de desolación, impotencia y cansancio de la mujer, ni la cara triste de los niños.